La «Columna de Armonía» se muestra con un elemento de suma importancia en el desarrollo del ritual, no en vano la música nos permite o nos ayuda a alcanzar el adecuado estado anímico que todo trabajo iniciático requiere al transportarnos desde el mundo profano a ese entorno que denominamos sagrado sin que tal apelativo tenga la más mínima connotación religiosa.
¿Qué sentido tiene utilizar música en las tenidas? Ayudarnos a transitar del mundo profano, de la calle, al mundo «sagrado» de la Tenida, para ello deberá utilizarse aquella que nos permita realizar una transición hasta alcanzar el estado de máxima receptividad hacia todo lo que acontece desde el momento en el que accedemos al Templo hasta que lo abandonamos. Deberá también ayudar a mantenernos en esa situación especial a lo largo de toda la Tenida evitando que, precisamente por una música inadecuada, desconectemos y perdamos la situación ideal a la que habríamos llegado.
Es frecuente, aunque cada vez menos, que quien se encarga de este oficio eche mano de la música denominada clásica como si en la contemporánea no hubiese suficiente material para conformar la parte musical del trabajo de una Tenida. Quienes así proceden parecen olvidar que no se trata de que la música sea clásica o moderna si no que cumpla con la finalidad antes apuntada. Por otra parte, no se debería olvidar que, por ejemplo, Mozart era todo un «moderno» en su época y que nadie pensaría en recurrir al barroco, por ejemplo, para escapar de la modernidad de nuestro ilustre Hermano.
Quien lleva la «Columna de Armonía» ya no es, normalmente, un Oficial instalado al tratarse de un oficio que, como algunos otros, se va perdiendo como parte integrante del Colegio de Oficiales; su existencia persiste y aunque un poco en segundo plano nadie duda, al menos así lo creo, de que tenga una gran importancia para que el desarrollo de la Tenida sea el mejor posible, llevándonos poco a poco a un estado que nos permita un mejor aprovechamiento de ese momento tan especial en la vida masónica que es la reunión de los miembros de un Taller para trabajar con el ritual. Nada digamos si se trata de una ceremonia de Iniciación o cualquiera otra de las que llevan a un nuevo hito como son los diferentes Grados.
No es un trabajo fácil, a la necesaria sensibilidad musical se une la exigencia de un conocimiento profundo del ritual para así entender el tipo de música que encaja con cada momento del mismo. Tal circunstancia obliga a un importante ejercicio de búsqueda de nuevos temas que eviten la repetición de los pasajes musicales y, al tiempo, el que las Hermanas y Hermanos no caigan, por ello, en la monotonía, compañera de la distracción, situaciones que harían de la música una herramienta inútil y por ello desaconsejable.
Agradezcamos pues el trabajo de quienes se hacen cargo de la Columna de Armonía y reconozcamos la dificultad de cumplir la tarea para obtener los resultados deseables
Y no sería posible elaborar una «lista base» una selección mínima q además de poder ser utilizada por los talleres, indicaran un modelo para cada ritual?
Creemos que la música utilizada en cada taller responde a su idiosincrasia y que eso hace que sea dificilmente exportable de unos a otros, en cualquier caso si que es cierto que las visitas a otras Logias pueden servir para conocer otras maneras de fusionar la música dentro del rito. En cualquier caso lo mejor sería que la «columna de armonía» estuviese en manos de alguien con sensibilidad y conocimiento suficiente del ritual para encontrar la mejor música para ocasión