Bueno, digamos más bien que el Gran Oriente de Francia admite mujeres o mejor aún que para evitar conflictos ha echado mano de la «solución española»: café para todos, aunque sea descafeinado.

Entre los variados blogs que se han echo eco de esta noticia, unos con euforia, otros con desidia, leí un comentario que me resultó impactante, decía:

El Gran Oriente admite todas las etnias, el Gran Oriente admite todos o ningún credo… el Gran Oriente no discrimina el género… ¡El Gran Oriente es universal!

Claro, así en español, resulta un poco arrogante pero leído en francés, cuando llegas a la parte de «universel» te quedas con una sonrisa helada. Ya se sabe que la masonería desenfoca un poco y que los miembros de ella nos arrogamos, a veces, más importancia de la que realmente tenemos. Y este hermano se ve que llevado por la euforia se deja arrastrar a «su» universalité con una pasión que le lleva más allá de la Puerta de Tannhäuser.

Pero volviendo al pequeño mundo masónico hispano, opino que el paso dado por el Gran Oriente hacia la comasonería le deja, en España, en una situación un poco incoherente. Recordemos que aquí la primera logia del GOdF fue Blasco Ibañez cuando a finales de los noventa del pasado siglo, tras un conflicto entre el DH y la GLSE decide abandonar esta y pasarse al GOdF. Este paso dado por la logia Valenciana animó a otros hermanos a crear logias en Alicante, Madrid, Gijón, Andalucía, Barcelona, buscando una obediencia liberal masculina. En principio parecía que estas logias se afiliaban al GOdF con la idea de primero crear una región española y luego dar el paso a un G. O. español masculino, a imagen y semejanza del francés. Pero no, quedaban vinculadas a la «Región Sur» del Gran Oriente de Francia que pasaba a denominarse «Región Sur y Logias de España», impidiendo la creación de una región española autónoma, futuro germen de una obediencia independiente. Así nos encontramos que más que una presencia del GOdF o un G. O. autóctono en España tenemos un grupo de logias desvinculadas entre si, dependientes de los dictámenes de una región francesa, sin representación española y con objetivos diferentes, divergentes o contrarios.

Un ejemplo opuesto es el de la GLFdE que nació de la GLFdF que , en cuanto pudo, empujó a las hermanas españolas a constituirse en obediencia. Lo mismo intentó la GLdF pero su debilidad y lo difícil que le resultó encontrar un hueco entre lo liberal masculino y la GLE dio al traste con el intento. Creímos que el GOdF iba a tomar esa decisión, ya ha crecido bastante en España para que sus logias sean independientes pero no, sigue unido a la casa madre.

¿Cuál es el objetivo del GOdF? No se sabe, tal vez no lo sepa nadie. ¿Cuál es su sentido en España ya que ha dejado de ser la federación masculina liberal de referencia? Con la triple opción existen ya en España la GLSE y el GOI., ambas liberales y con el rito moderno asimilado. ¿Dónde se situará el GOdF al haber perdido su «particularidad» y competir en espacio con obediencias liberales  españolas? ¿Se convertirá en otra obediencia más de la infinidad que tenemos en España? ¿Constituirá una obediencia europea admitiendo en igualdad a los miembros de los otros estados o se mantendrá siendo francés con satélites subordinados? No parece que vaya a perder en bastante tiempo su grandeur y su universalité française, no confundir con internacionalité. Internacionalidad es admitir en nivel de igualdad las carácteristicas de las distintas culturas, no pasarlas todas por el cedazo de una en concreto.

Y, finalmente, una pregunta ¿Veremos algún día alguna Logia formada exclusivamente por mujeres bajo el paraguas del GOdF? Porque de todo se ha visto.